El propósito de este post es animar a la gente a visitar Goražde aprovechando cualquier visita a la costa croata o a Sarajevo, las opciones de llegada en transporte público las explico aquí, lo más sencillo es hacerlo desde Sarajevo o en coche desde cualquier lugar, las distancias en los Balcanes son pequeñas.
El nombre de Goražde va unido al de otras zonas que durante la agresión serbia y croata a Bosnia fueron denominadas como Zonas Protegidas, junto a Srebrenica, Žepa, Sarajevo y Bihać, la única de Bosnia oriental que logró resistir el acoso de la artillería serbia que rodeaba los montes de la ciudad y que llegaban a lanzar 2000 proyectiles diarios, estuvo a punto de acabar como Srebrenica, los bombardeos de la OTAN sobre zonas serbias propiciaron los acuerdos de Dayton y el comienzo del fin del infierno en Goražde, 4220 muertos y 1365 días después.
Cuando llegaron los primeros periodistas a la ciudad se quedaron horrorizados por la situación en la que se encontraban las 70000 personas que llegaron a vivir aislados en este infierno, en una de las crónicas se hablaba de la Numancia bosnia, en realidad era algo peor, Numancia se encontraba en lo alto de una colina y Goražde en lo bajo de un valle con tanques disparando desde colinas situadas a unos cientos de metros del centro de la ciudad.
«Esto es el infierno», dice Susan Sontag. La escritora no había visto nada igual en ninguna de sus ocho visitas anteriores a Bosnia. Y es que nunca había podido ir a Gorazde. De todas las ratoneras de los Balcanes, Gorazde es la peor. Peor incluso que Sarajevo. Cercada por todas partes por los serbios, Gorazde ha pasado tres años y medio ametrallada y bombardeada a diario y completamente aislada del mundo. Tan sólo el pasado 17 de octubre, cinco días después del alto el fuego, los serbios dejaron entrar en la ciudad el primer convoy de la ONU desde el estallido de la guerra en la primavera de 1992. Ahora entran uno o dos cada día con alimentos y medicinas.
Una vez declarada la independencia de Bosnia Hercegovina por la mayoría parlamentaria, los dirigentes serbios ayudados por el potente ejército yugoslavo iniciaron un ataque y se apoderaron de la práctica totalidad del territorio iniciando lo que se conoce como limpieza étnica que consistió en el asesinato o expulsión de la población no-serbia de esas zonas, en la mayoría de las cuales la población bosniaca era mayoritaria, esta población huyó a las zonas controladas por el naciente estado que posteriormente pasaron a llamarse zonas protegidas, a la agresión serbia se unió la del naciente estado croata que quería apropiarse de algunas zonas de hercegovina siguiendo el plan diseñado por Milósevic y Tudjman para repartirse Bosnia entre Serbia y Croacia (Acuerdo de Karađorđevo), realizado mientras ambos paises estaban en guerra.
En el caso que nos ocupa, el valle del Drina, las unidades chetniks serbias (Tigres de Arkán) durante los primeros meses de guerra asesinaros a cientos de personas en el puente de Višegrad, el caudaloso Drina se teñía de rojos en los días que se producían las decapitaciones de familias enteras, se crearon centros de violación de mujeres tanto en Višegrad como en Foča, la gente huyó despavorida por la montañas en dirección a Goražde, una ciudad que contaba con 35.000 habitantes pasó a tener 70.000, sitiada, sin suministros y bombardeada constantemente.
Se suele comentar que en una guerra todos los bandos cometen atrocidades, pero conviene recordar que en el caso de Goražde hasta en los peores momentos de bombardeos hubo población serbia, que continúa viviendo en la ciudad, a las que se les repartía su correspondiente ración diaria como cualquier otro ciudadano, todo esto en un contexto de una agresión brutal y con población refugiada que había perdido familiares en zonas controladas por los serbios.
Hoy en día Goražde es una ciudad llena de gente joven, las heridas de la guerra son visibles, muchos edificios siguen con sarampión,
en las calles todavía se ven los restos de las explosiones de los morteros
se pueden visitar los tanques serbios que estuvieron bombardeando la ciudad
y la pasarela bajo el puente que permitía cruzar el río sin exponerse a los bombardeos y francotiradores.
La ciudad se ha ruralizado debido a la avalancha de refugiados que llegaron de todos los puntos del Drina, se ha islamizado un poquito (se nota especialmente durante el Ramadán), aunque es algo excepcional ver a mujeres con el chador, la principal actividad económica de la ciudad son 2 empresas que emplean a gran parte de la población, el gobierno de Turquía ha construído una gran mezquita en la ciudad y un parque a orillas del río.
Los alrededores de la ciudad siguen minados, no es recomendable transitar fuera de los caminos marcados lo que limita el desarrollo del sector terciario.
La relación de la ciudad con los pueblos vecinos es inexistente (Nos odian dicen en Goražde), la única conexión «amable» es con Sarajevo.
Una de las cosas que me decepcionó es que no exista un lugar donde se explique lo que pasó durante el sitio, se muestre la vida durante aquellos años y los objetos creados con mucho ingenio y escasos materiales con los que lograron sobrevivir, desde molinos/generadores realizados con motores de lavadora atados al puente para conseguir corriente eléctrica gracias al caudal del Drina, las armas artesanales para poder proteger la ciudad,
las radios caseras, … una extraordinaria exposición que pudimos ver hace años en San Sebastián y que posteriormente se realizó en Goražde una auténtica lástima y espero que se pueda repetir y esta vez de forma permanente.
Un lugar donde gente como Abduselam -Pelam- Sijerčić, comandante de la Brigada 31 de Drina, encargado de la defensa del flanco sur durante la guerra, pueda contar las historias vividas y que permitieron resistir milagrosamente el brutal asedio sin apenas medios.
Apenas existe vida cultural fuera de los espectáculos folclóricos el único cine existente continúa cerrado, hay muchos locales de apuestas deportivas en general algo común al resto de Bosnia.
Llegan pocos turistas, algún mochilero de vez en cuando atraídos por el cómic de Joe Sacco, Goražde: Zona protegida (Safe Area Goražde), que explica la historia de la ciudad durante la guerra en la que vivió los últimos meses de la guerra.
Para que la gente que vista Goražde pueda recorrer algunos sitios interesantes os propongo el siguiente mapa
Aziz -Zisko- Gluščević, personaje donde los haya, canta a Goražde y al Drina
Goražde volim te!
PD: La calidad de las fotos no es la mejor, afortunadamente se extropeó la cámara el primer día de viaje y pude disfrutar más de el, pero con peores fotos.
Ketari Blog 
Gracias por ir a Gorazde y por dejar marcado en el mapa, el parque Plavi Cvijet. Fue un proyecto complicado que nos hizo «sufrir» lo nuestro pero el resultado mereció la pena. Dentro de un mes (4 junio 2016) el parque cumplirá 6 años y sigue estando bien cuidado, quizás porque sigue desprendiendo el amor con el que lo proyectamos y lo hicimos.